SIN ATADURAS

Las paciones llegan a ser más fuertes que cualquier razón, yo lo sabia pero mi cuerpo lo necesitaba, mi cuerpo lo pedía a gritos y yo estaba dispuesta a solo hacerle caso a mis instintos y no a mi molesto cerebro con el que luchaba para que no me dominara estas ansias por tenerlo nuevamente en mis brazos, disfrutar de sus besos y sentir sus manos en mi piel, sabía que estaba jugando con fuego y que estaba perdida totalmente porque me había enamorado de lo mas prohibido pero lo más rico del mundo, y no me importaba quemarme entre las llamas del infierno si al final el estaba conmigo.

Estaba parada en el salón de recepciones inmóvil como una estatua su rostro entre los presentes fue el primero que vi y me paralizo de pies a cabeza, mi prometido estaba a mi lado y su familia nos esperaban para formalizar nuestro compromiso era el boda de su hermano y él había escogido este momento.

          

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LA PRIMERA VEZ

(CAPITULO 1)

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___ Te veo en la tarde. ---- me despedí de mi novio al entrar corriendo a la universidad, ya era tarde y tenía un sanción por el mismo motivo así que mas me valía llegar a tiempo, mi novio era un hombre en toda la extensión de la papaba y todo un caballero conmigo aunque la verdad yo quería que no lo fuera tanto, aunque era bueno en la cama, me satisfacía eso no lo podía negar pero sus atenciones no eras ni la mitad comparadas con las de él hombre que ocupaba mis pensamientos mi novio no le llegaba ni a los talones.

Yo una chica de apenas veinte años  que había quedado sola al morir mis padres, hacia apenas un par de años había tenido que salir adelante por mis propios medios, nunca me la había cuestionado pero la verdad en los últimos meses era una carga muy grande que yo llevaba a cuestas, nadie ni mis mejores amigas sabían a lo que yo me dedicaba, y mucho menos sabia que al llegar la noche, mis jeans de mezclilla desgastada y mis playeras de comics quedaba atrás para darle paso a lencería francesa, la más sensual que hubiera en el mercado, y un corsete que amoldaba  mi figura en provocadoras curvas, eran solo fantasías había dicho mi patrona Tanya “míralo solo como un trabajo lucrativo y eso es todo”, me había asignado a solo dos desde el principio, un adulto y un joven, la primera vez que lo había hacho llore durante semanas y después solo lo veía como un simple trabajo, fingiendo que sentía lo que en realidad no sentía. Si yo serbia para que esos hombres desahogaran sus más bajos instintos era una prostituta aunque había terminado siendo la amante del mejor hombre del mundo.

Mis clases empezaron pero mi mente volaba a mi alrededor, ya tenía más de un mes que no lo veía y eso me torturaba, el andaba en un crucero con su esposa y sus hijos menores, así me lo había dicho antes de irse, yo como siempre solo le había deseado lo mejor y que se la pasara muy bien en sus vacaciones, era muy entregado a su carrera y me encantaba cuando me llamaba para acudir a su consultorio, violábamos todas las reglas pero él no sabía que yo lo amaba hasta la ultima célula de mi cuerpo, nunca se lo había dicho y nunca se lo diría, el y yo solo éramos compatibles en la cama y nada más sin ataduras.

El maestro llamo al orden y como en una nube llegaron a mí los recuerdos de mi primera vez con él, era una noche de mayo yo estaba literalmente desparramada en mi cama, eran cerca de las ocho de la noche y me celular sonó varias veces antes de tomarlo y responder, al principio no conocí el numero así que dude hablar como lo hacía para mis dos clientes habituales.

----- ¿Diga? ----- respondí insegura y algo titubeante.

----- Necesitó de sus servicios, la veo en el hotel Best West habitación # 17 ---- pero antes de podre responder algo termino la llamada, era una voz calmada nada excitada así que me vestí rápidamente para acudir con el extraño que me había llamado, estaba escogiendo si me ponía un vestido pegado o un conjunto de dos piezas, cuando mi celular sonó de nuevo al principio pensé que era el mismo hombre pero al mirar el identificador me di cuenta que se trataba de Tanya, respondí y  a toda velocidad.

----- ¿Tanya? ---- pregunte estúpidamente.

----- ¿Y quién mas si no? ---- respondió en una sonora carcajada, obligándome a retirar el celular de mi oreja.

----- ¿Pasa algo? ----- ella rara vez me llamaba a esta hora.

---- En realidad si, te mande un cliente que merece trato especial, el es todo un caballero así que cariño saca del demonio que el lleva dentro, porque yo no pude llevarlo a mi cama y eso me molesta, el quiere con alguien que no sea yo así que como yo te quiero como si fueras mi hija te lo brindo cielo. ---- vaya forma de ser madre de esta putona, en fin.

---- ¿Y se supone que te tengo que agradecer o algo? ----le pregunte irónica.

---- Mas que eso querida, me harás un altar ya lo veras. No hagas esperar a ese hombre adiós cielo.

---- Si adiós te llamo mañana. ---- me puse el vestido pegado de una sola pieza, el corsete quedaba oculto y elegí como seria hoy pues usaba pelucas de diferente color con cada cliente, así que me incline por una pelirroja, me instale bien mi nuevo cabello y retoque el maquillaje un tanto recargado mis labios muy rojos y me envolví en mi abrigo apretando bien el cinturón, tome mi bolso y salí a los elevadores unos hombres que subían en el piso de abajo me miraban y no pude evitar como entre ellos decían cosas así como “si esa mujer estuviera en mi cama la aria sufrir un poco” ni en sus sueños ellos podrían pagar mis servicios yo era demasiado cara para que gente como esa me tuvieran en su cama, pues yo cobraba la noche lo que ellos ganaban en un mes de trabajo forzado.

----- llegue a la calle y pare un taxi que me llevaría al encuentro del hombre extraño, así que no tardamos nada solo veinte minutos y yo ya me encontraba caminando dentro del hotel buscando la habitación, recorrí un pasillo muy largo y al final me pare en el número 17 del Best West, solté el aire y di dos suaves golpes en la puerta, solo dos segundos después la puerta se abrió.

Y ahí estaba el, un hombre simplemente bello, con apariencia mas civilizada que los otros, con mirada tranquila, el me ofreció entrar y lo hice, al principio ninguno dijo nada así que como yo era la “experta” pues se lo pregunte.

---- ¿Me quieres toda la noche? ¿O solo un encuentro? ---- el me miro de pies a cabeza varias veces, por un momento me incomode demasiado pues él no había abierto la boca para nada.

---- Eso aun no lo decido. ---- su voz resonó en mi estomago era varonil pero gentil.

---- ¿Quieres algo de tomar? No tengo mucho que ofrecerte pero podemos mitigar la sed. ---- aparte de ser guapo era educado, ahhh mi interior reacciono raro pero no preste atención a eso.

---- Una botella de agua está bien gracias.  ----- el quito la tapa y me la dio, yo puse mi bolso en la mesa junto a la puerta y me quite mi abrigo, cuando me gire al verlo él me observaba de arriba abajo.

---- Eres muy bella. Y muy joven. ---- como siempre eso era lo que me decían los hombres, así que camine sensualmente pegando mi cuerpo junto al suyo, pase mi mano hasta su cabello y lo acaricie mordiendo mi labio un poco.

---- ¿Y te gusta lo que ves?  ----- el paso saliva pesadamente y una de sus manos me acariciaron la espalda.

---- Mucho. ---- fue lo único que dijo, levante mi rodilla entre sus piernas morbosa y queriendo corromper la actitud de este monumento a la belleza masculina, tal como lo había dicho Tanya, el valía la pena y ella se merecía algo más que un monumento.

---- ¿Qué es lo que te gusta? ---- le dije en su oído.

---- Todo lo que me quieras hacer. ---- respondió cerrando los ojos.

---- Pues tengo pensado hacer muchas cosas. ---- le dije resbalando mi mano y apretando su trasero, el soltó un gemido suave y en ese momento supe que él nunca había estado con alguien como yo, así que me tomaría tiempo en los detalles él no era de los que lo hacían en un baño pagaban y se iban, el había llegado para quedarse y me encargaría de llevarlo a dar un paseo conmigo al universo del placer y deseo.

---- ¿Te importaría si te desnudo? ---- le dije en su oreja mordiéndolo un poco, el solo lo negó en un movimiento imperceptible de cabeza, así que me dedique a desabotonar su camisa, deleitándome al mirar sus músculos bien torneados tal vez me doblara la edad pero era impresionantemente guapo, mis dedos rosaban la piel de su pecho, y el bellos que lo cubría era muy varonil, mis manos soltaron su camisa al piso y dieron paso a recorrerlo con las palmas abiertas su espalda firme y su trasero bien formado, mis dedos soltaron el su cinturón y bajaron la cremallera del pantalón que cedió al instante cayendo hasta sus tobillos, su bóxer, de Calvin Klein bien ajustado mostraba su paquete.

Entonces el abrió los ojos encontrándose con los míos, el deseo salía a la luz, el tenia un color verde apagado algo así como el de las olivas, entonces empezó a cooperar, el recorrió mi espalda y llego a el cierre de mi vestido soltándolo y bajándolo con delicadeza, mis manos seguían palpando su torso desnudo, y él se quedo sin respirar cuando mi vestido cayó al piso dejando paso a mi sensual lencería, el ligero y el corsete acompañado de una tanga con un pequeño encaje en la parte de atrás, entonces sus manos acariciaron mi trasero, creo que en un momento sentí cierto temblor en ellas, pero no permitiría que él me soltara yo sentía algo extraño y ya era tarde para arrepentirse, así que mis labios buscaron su cuello el me detuvo a mitad de hacer contacto y tomo un pequeño pañuelo de la mesa limpiando el lápiz labial.

---- Tus labios son más lindos sin eso. ---- me dijo capturando mis labios con los suyos mi cuerpo parecía como si fuera un imán, y él fuera la base de metal me adhería a su piel como si fuéramos viejos amantes sin pena ni reserva, sus manos me recorrían y mis labios no dejaban de besarlo, yo acababa de violar una de mis reglas sagradas, y era nunca besar en la boca a un cliente pero él lo necesitaba y yo lo deseaba.

Mis labios seguían en los suyos y mis manos retiraban su bóxer al tiempo que su erección quedaba liberada, mi pierna derecha la sentía era prominente grande y gruesa, el soltó las abujitas del corsete liberando mis senos, quedaron expuestos ante su pecho y él me retiro un poco para admirarlos, en un excitante y erótico el paso el reverso de su mano por encima de mis pezones que estaban rígidos tan duros que la sensación del rose llegaba a mi intimidad, entonces el caballero se convirtió en un amante experto, sus labios viajaron por mi cuello y mis hombros, deslizándose a mis pechos que subían bruscamente al sentir su aliento acercándose a mis pezones que querían sentir como los podían succionar.

El los lamio, succiono y los mordió torturándome con delicadeza su boca era experta pero, yo estaba para complacerlo no para ser complacida así que lo detuve al tiempo que bajaba por mi vientre, el me miro con sus ojos llenos de placer y lujuria. Lo tome de la mano y lo lleve a la cama empujándolo suavemente en ella, me deslice como una gatita hasta quedar encima del, lo bese con intensidad y baje por su cuello hasta besar sus pectorales, mi lengua recorrió el camino de bello hasta llegar al vientre bajo, mis labios apretaron la punta de su erección pasando mi lengua por ella, y mi boca se abrió completamente para llenarla con su carne tibia y suaves, el estaba tan duro que mi humedad palpitaba, y por primera vez. Yo no estaba fingiendo estaba sintiendo a un hombre de verdad, estaba haciendo el amor no el sexo, aun cuando no sabía ni su nombre.

La succione con fuerza haciéndolo gemir y jadear con movimientos de sus caderas contra mi boca, su miembro se retorcía de placer absoluto, su punta palpitaba en repetidas cocciones, yo saboreaba los jugos de su erección, el anticipado a lo que me esperaba, puse mis senos a la altura de su rostro esperando ver como el llenaba su boca con mis pezones una a la vez, succionaba yo quería sentirlo dentro así que me puse de rodillas frente a él bajando  mi tanga con sensualidad, mi intimidad estaba ante sus ojos y su miembro ante los míos, así que lo monte colocándolo en la entrada de mi mojada humedad, el apretó mis caderas cuando sintió como entraba en mi su miembro en mi, se perdió en mi interior y yo curvee mi espalda hacia atrás sus manos apretaron mis muslos y sus caderas se movieron nuestros movimientos se unieron y la fricción de nuestros cuerpos crecía, el me giro en la cama tomando el control, sus caderas se impactaban contra las mías, sus embestidas era fuertes y precisas, el sonido de nuestras carnes chocando llenaba la habitación sus gemidos se perdían en el interior de mi boca al tiempo que lo besaba apasionadamente, mis manos se aferraban en diferentes partes de su cuerpo a la vez mis caderas se movían frenéticas y su erección impactaba mi interior con maestría, en repetidas ocasiones mis uñas se calvaron en sus hombros y la sensación de libido era poca, mi éxtasis llegaba como una estampida de furiosos toros queriendo arremeter contra el muró que lo detenía, el deseo por este hombre crecía al tiempo que sus jadeos se extendían en el interior de mi garganta haciendo que algo en mi interior se encendiera, era diferente estaba interactuando con el al unisonó, mis caderas frenéticas querían mas  embestidas mas penetraciones constantes y fuertes quería llegar al mejor orgasmo de mi vida, sus manos se posicionaron debajo de mis nalgas presionando la entrada de mi zona prohibida sus dedos se aferraban a esa parte provocando como mi interior una corriente de lava quería explotar como un volcán, sus caderas seguían chocando con las mías, sus labios atrapaban mis pezones y sus embestidas se aceleraban el estaba a punto y yo ya llegaba, mi orgasmo se desparramo en mi interior con olas que hacían mi cuerpo se estremeciera y que una convulsión interna enredara su miembro al tiempo que su propio clímax explotaba su placer y deseo terminaban en mi interior succionando mis pezones en un acto tan viejo como el mismo tiempo, su hermoso cuerpo colapsó a mi lado y pude acariciar su rostro que me miraba con esos ojos lindos casi grises, el placer reflejado en un hombre el deseo convertido en mujer.

Después de un rato él se levanto de la cama y tomo sus cosas entrando al baño, “eso era todo” el me pagaría y después se iría seguro con su esposa y sus hijos era lo normal no.

Me deje caer en las almohadas deseando poder borrar todo lo que yo era y que este encuentro fuera más que una aventura fugas, el hombre que me había hecho sentir realmente una mujer amada por un minuto,  me pare y tome mis cosas vistiéndome rápidamente, me mire en el espejo y acomode la peluca un poco despeinada, limpie mis ojos y puse un poco de labial, me estaba subiendo la cremallera del vestido cuando él salió.

---- ¿Te vas ya? ----- me pregunto al tiempo que tomaba su saco de una silla.

---- Pensé que tú te retirabas ya. ---- me mordí el labio incomoda no sabía que decir. Nunca platicaba con mis clientes.

---- Si la verdad que me retiro solo quiero pedirte algo. ---- lo mire más que extrañada sorprendida.

---- La próxima vez que te vea, quiero que no te pongas peluca y que tu maquillaje sea discreto, la lencería mas sexi que tengas está bien. ---- sonreí ante su petición no era mucho problema para mí.

---- ¿Una pregunta más cuál es tu nombre?

---- Luna ---- dije sin pensarlo.

---- Si se que te llaman Luna, ¿pero yo quiero tu nombre real? ---- lo pensé un poco el me quería ver de nuevo y mi corazón dio un brinco entonces lo mire y seriamente le dije.

---- Bella mi nombre es Bella. ----- el abrió la puerta y antes de salir deposito un sobre en la mesa de la entrada.

----- Entonces te veo el próximo sábado Lunita Bella. Me llamo Carlisle.

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Chicas el primer capi de 5 espero les guste déjenme sus comentarios por favor

Este mini fic es a honor de mi amiga Kathy amiga servida jajjajajaj

Y a todas las demás plissssssssssssssssssss sus comentarios me hacen muy  felizzzzzzzzzzzzzzzzz

Su loca amiga de siempre

SIV-LUNITA-SIV